Irma Hernández, Finca Las Delicias & dos parcelas más: El Barrial, El Duraznal

SOY LA SEGUNDA GENERACIÓN DE CAFICULTORES Y AUNQUE YA ME ESTOY HACIENDO MAYOR, SIGO TRABAJANDO EN LA FINCA CUANDO PUEDO…

Mi marido falleció en el 2019, así que tengo una responsabilidad mucho mayor con la finca que antes, y ahora también debo mantenerme a mí misma. Afortunadamente, tengo una pequeña tienda de comestibles donde vendo productos básicos como agua, papel higiénico y arroz, pero a menudo cierro la tienda durante unas horas para trabajar en la finca. Mi hija Vanessa, que también es propietaria de una de nuestras parcelas, y yo contratamos a veces ayuda, cuando es demasiado para nosotras dos, especialmente durante la temporada de cosecha.

Siempre me reí de Vanessa cuando noté su entusiasmo por el café, especialmente durante la temporada de cosecha, cuando mi marido y yo la dejamos recoger algunos granos. Pero tengo que admitir que cuando era pequeña, yo hacía lo mismo.

Mis padres fueron los primeros de nuestra familia en cultivar plantas de café. En aquella época, tenían que regar cada planta por separado, porque no había nada de sombra. Ahora, tenemos muchos árboles que nos dan sombra, como el chilindrón, el cuajiniquil, el liquidambar y los robles; árboles nativos de nuestra región.

Estoy decidida a mejorar continuamente la calidad de nuestros cafés y a ofrecer microlotes preparados con diferentes procesos. Vanessa y yo estamos especialmente interesadas en establecer relaciones duraderas con pequeños y ambiciosos tostadores de cualquier parte del mundo. Yo ya trabajo con un tostador de los Países Bajos y otro de Australia.

Cuando trabajamos juntos durante un periodo de tiempo más largo, podemos ir afinando poco a poco nuestros lotes de acuerdo con las preferencias de un tostador y, juntos, preparar cafés que se adapten perfectamente a las paletas de nuestros consumidores finales.

 

Datos de la finca

7 hectáreas, divididas en tres lotes que están cerca uno del otro, todos ubicados alrededor de 1.300 metros.

Cultivamos Lempira, Paca, Parainema, 90 y tenemos mucha sombra de árboles nativos como el chilindrón, cuajiniquil, liquidambar y robles.

También tenemos naranjos que, además de dar sombra, impregnan de sabor cítrico a los cafetos de alrededor.

Nuestra finca está certificada FTO.

Esta finca está certificada por Rain Forest Alliance.