Agroforestería y economía circular

Pero vamos más allá de los sellos, porque somos ambiciosos, y porque sabemos que también es nuestro propio interés a largo plazo. Estamos convirtiendo cada vez más hectáreas de nuestras plantaciones en agroforestería. 

En el 2019 y 2020, hemos plantado quince mil árboles para incrementar la sombra, mantener más agua, atraer pájaros (incluso, aves migratorias), combatir la erosión, y disminuir considerablemente nuestra huella carbónica. Los árboles, además, ayudan a obtener una mejor calidad de granos. También diversificamos nuestras fuentes de ingreso: parte de los árboles sembrados son aguacate y limón, para consumo propio y venta en el mercado nacional. Recibimos apoyo de la fundación Neumann para realizar esos programas.

También brindamos talleres para implementar las buenas prácticas en todas las parcelas: conservación del suelo, buenas prácticas agrícolas, disminuir la erosión con pastos como el zacate limón. Pero también nuevas técnicas de siembra y distanciamiento de planta, y manejo responsable de la finca.

Varios de nuestros productores han empezado con la apicultura. Cierto, para mejorar la polinización en sus fincas, pero también para alquilar sus colmenas a otras fincas, y - obviamente - para producir una deliciosa miel 100% natural. 

Cada vez más miembros usan la pulpa de los granos de café como abono para sus plantas. Es más saludable y más efectivo, y no hay contaminación. También vendemos - por el momento una parte mínima - de la pulpa para infusiones y tés.